Seguidores

lunes, 31 de octubre de 2011

Gracias, thanks, grazie, merci :)

Esta entrada la voy a dedicar a mis 80 seguidores.
Porque todavía recuerdo cuando mi blog no lo veía casi nadie. Muchas muchísimas gracias por seguirme, enserio.
Sois vosotros por los que yo escribo día a día. Vosotros hacéis que en mi rostro florezca una gran sonrisa. Me alegráis el dia. Es por eso que os quiero dar las gracias.
Y espero que lleguemos a los 100 ;)
Os quiero.
Gracias, thanks, grazie, merci, eskerrikasko. :)


Chloe.

viernes, 28 de octubre de 2011

Ídolo.

Hoy he decidido hablaros sobre mi nuevo perrito. Él es Ídolo y lo quiero un montón.
Como ya visteis, publiqué dos entradas sobre mis otros dos perritos, esos que fallecieron a la semana. Todo eso para nosotros ha sido muy difícil de superar, pero con el tiempo todo se consigue. Claro está, que ya nos habíamos decidido a tener un perro, y no nos imaginábamos una vida sin uno, así que decidimos comprar otro, y aquí está.
Debo añadir que ni loca lo compramos en el mismo sitio. Para que, ¿para que nos lo dieran otra vez enfermo y volviéramos a sufrir por otra perdida? Por muy baratos que fueran, no estábamos dispuestos ha pasar otra vez por lo mismo, no somos masoquistas, así que buscando y buscando encontramos un sitio buenísimo, aunque algo bastante más caro. Allí lo vimos, a Ídolo, y desde el primer momento supimos que ese tenía que ser nuestro perro. Queríamos comprarlo, pero todavía teníamos esa pequeña duda de si podría coger la enfermedad. Ya habíamos desinfectado a muerte la casa, y más no podíamos hacer.
Claro está que a parte de que Koko y Duke vinieron enfermos, nos lo dieron sin vacunas, y con apenas un mes de vida, si es que lo tenían.
Todo eso hizo que murieran a la semana. Eran demasiado pequeños, sin vacunas, sin defensas.
Pero no solo nos duele por ellos, sino por la cantidad de perros inocentes que hay en esa tienda, y a todos los compradores que les pasará lo mismo que ha nosotros. Denunciable, ¿no creéis?  Juegan con los sentimientos de las personas, y acaban con las vidas de unos pequeños animales que tienen el mismo derecho a vivir que ellos, y todo esto por una suma cantidad de dinero. Es increíble lo que el ser humano puede llegar a hacer por dinero. Es asqueroso, de verdad.
Pero bueno, no estoy aquí para hablar de eso, y aunque me duela no podemos hacer nada, salvo rezar para que les cierren la tienda a esos hijos de puta.
Estoy aquí para hablar del perrito más bonito del mundo. Porque no puedo negar que el cariño que les cogimos a Koko y a Duke es inimaginable, pero tengas el perro que tengas, siempre le cogerás muchísimo cariño.
Ídolo lleva ya una semanita con nosotros. Todo un record, ¿eh? Pero estamos felices, muy felices ya que se le ve realmente sano, y esperamos que sea así durante mucho, mucho tiempo.
Este cachorrito si que tiene los dos meses cumplidos, no como los otros, y tiene 2 vacunas, puestas de verdad.
Es el doble de grande, lo que conlleva a más defensas.
No os podéis ni imaginar el cariño que se le puede coger a un animalito como estos. Es tanta la alegría que te da que todas las penas y los enfados se te olvidan nada más verlo. Además, tengo que deciros que Ídolo es realmente bueno. Cariñoso siempre, juguetón cuando tiene que serlo. No para de chupar. Todo, todo lo que pilla, coge y lo chupa.
Está lleno de vida, y cada vez que le damos juego se pone a saltar y a correr de alegría como si fuera un conejo.
Cuando lo dejamos solo en la sala, empieza a llorar, llamándonos. Se pone a dos patas para captar nuestra atención y vallamos a hacerle compañía. A veces puede ser un poquito pesado, pero lo bueno es que al rato se da cuenta de que nosotros también tenemos nuestros quehaceres, y que no podemos estar las 24 horas del día junto a él, así que coge sus peluches y se pone a jugar con ellos.
Está realmente cambiado al primer día que llegó a casa. Llegó con un miedo terrible, con la cola entre las patas, los ojos llenos de lagrimas y temblando. No nos conocía, estaba muy asustado. Rápidamente se relajó, ya que le ofrecimos todo el cariño que pudimos y más.
Al llevarlo al veterinario nos comentó que estaba en perfectas condiciones, salvo que un poquito constipado. Lo más probable es que cogiera frío en el viaje, pero bueno, gracias al jarabe va mejorando.
Y debo admitir que solo de pensar en que puede marcharse, me invade el pánico. Ya nos hemos acostumbrado a su compañía, y no nos imaginamos una vida sin él. Ídolo ya forma parte de nuestra familia. Él es hermano que nunca tuve, mi mejor amigo.
Y aquí estamos, ahora en Cabárceno, ya que nos hemos venido a pasar el puente aquí, junto con nuestros tíos y Ídolo. Como no conoce todavía la autocaravana está un poquito asustado, pero pronto se adaptará, ya que para eso estamos nosotros, para darle el mayor cariño del mundo.
Tal vez sea un bicho, pero es nuestro bicho♥




 Chloe.

jueves, 27 de octubre de 2011

No es que este loca,

Es que escondo mi tristeza detrás de un puñado de risas, porque así todo me resulta mas fácil. Y no, no es que no tenga problemas, o que las cosas no me afecten, es que yo las almaceno, las meto en una maleta, y con cada risa, los intento enviar dentro, mas dentro, donde casi no los pueda ver., aunque… tiene un inconveniente, de vez en cuando la maleta.. explota. Pero me enseñaron a ser valiente, me esfuerzo por ser luchadora y pelearé por mi felicidad. 


Chloe.

miércoles, 26 de octubre de 2011

QJ.

Savannah: ¿Te has dado cuenta de lo grande que es la luna cuando sale y lo pequeña que es cuando está en lo alto del cielo? 
John: Eso depende de tu perspectiva. En realidad, no importa dónde está el cielo o dónde estás tu en el mundo, si levantas la mano y cierras un ojo, nunca es más grande que tu pulgar. 

martes, 25 de octubre de 2011

Soy bipolar.

Cambio de opinión constantemente. Puede que ahora te quiera y dentro de un minuto te odie. Que ahora seas todo y después no seas nada. Pero soy verdadera
Cuando te quiera te querré de verdad con todo mi alma y centraré mi mundo en ti, y cuando te odie te odiaré de verdad y desearé que no existas. 

Chloe.

jueves, 20 de octubre de 2011

#Por cosas como estas son por las que te quiero.

-Dani, no quiero que te vallas…
-Érica, yo tampoco quiero irme, pero entiende que no puedo hacer nada. Debo marcharme, ya no hay vuelta atrás…
-Nada es imposible, lo sabes. No quiero reprocharte, ni que pienses que no te entiendo, pero no se, pienso que si de verdad me quisieras, daría todo igual. Te quedarías junto a mí…
-No se trata de querer. Sino de poder. Yo no puedo, y lo sabes perfectamente.
-No sé…
-A las 11:00 estate en casa, pasaré a recogerte. Arréglate y ponte guapa, princesa. Es nuestra última noche. Te he preparado una sorpresa.
-Bueno, está bien. Hasta luego.
A las 10:30 ya me había preparado del todo. Me puse lo más guapa que pude, con un vestido que me había regalado mi madre cuando cumplí los 16. Solo lo usaba para ocasiones especiales, y esta sin duda iba a ser una de las mejores.
Las 11:00 en punto. Se escuchó el timbre así que bajé para abrir la puerta. Me llevé una gran sorpresa, no era Dani, sino un taxi. Venía de parte de el. Me monté, sin saber a donde me llevaría, pero enseguida lo descubrí. Aquel taxi me dejo en el mejor sitio que jamás hubiera imaginado. La playa en la que Daniel y yo nos enamoramos hace apenas un año. Esa playa en la que pasamos la mejor noche de nuestras vidas, desde ese momento, supe que seria para mí. Hasta ahora.
Me bajé del taxi conmocionada pero allí no había nadie. Estaba todo bastante oscuro y me costaba distinguir las cosas. Caminé hacia el agua, y de pronto un farol se encendió. Algo asustada caminé hacia él. Bajo la débil luz se podían distinguir palabras escritas cuidadosamente sobre la arena, en las cuales ponía: 
Bien, comencemos. Supongo que sabrás porque te he traído aquí. De todos modos te lo explicaré mejor en la siguiente pista. Si, así es. Esto es un juego y el premio soy yo. Allá va la pista: “Siempre, siempre, siempre, D&E.”
Sorprendida por todo aquello, me quedé pensando en la pista, y rápidamente caí en la respuesta. Eran las palabras que grabamos una vez en una de las rocas de la playa. Corriendo me dirigí hacia ella, y en efecto, un papel doblado se encontraba justo al lado.
Lo desplegué, era una carta.
Lo has hecho genial Érica, sabía que lo harías. Siempre lo haces, eres perfecta y por eso te quiero. Te he traído aquí porque para mi este es el lugar más importante de todo el mundo. Da igual a donde valla, con quien valla. Este sitio para mi, siempre será el mejor. Tal vez no sea el mas bonito, ni el mas divertido, pero fue en este lugar, donde me enamoré de la chica mas preciosa del planeta. Por eso este lugar es muy especial para mí. Tú has hecho que sea especial.
Da diez grandes pasos de esos que tú sabes dar mirando a la luna. Te quiere, Daniel.
Hice lo que ponía y esta vez la carta se encontraba al lado de una preciosa vela. La abrí, y comencé a leerla.
Tal vez ahora pienses que no te quiero. Y lo entiendo, estás en todo tu derecho de hacerlo. Se que no entiendes porque me voy, pero algún día lo harás. Ahora mismo no puedo explicártelo pero lo haré.
Ahora, lo unció que me importa es que sepas que te quiero, porque es lo que siento, es la verdad. Desde la primera vez que te vi, Érica, supe que estábamos destinados a estar juntos. Cada vez que te miraba a los ojos me invadía un gran sentimiento. Tu sonrisa me encandilaba, me encantaba verte sonreír. Por eso cuando en aquellos días tristes se te borraba, ahí estaba yo dispuesto hacer todo lo posible para que esa preciosa sonrisa volviera a brillar en tu rostro.
Cada día que pasaba junto a ti, mis sentimientos crecían. Podía pasarme un día entero simplemente observándote.
Hoy y siempre, te quiero dar las gracias por haberme abierto los ojos. Por enseñarme que es eso del amor, por enseñarme todas esas cosas bonitas que pueden albergar en una persona tan pequeñita. Y lo sé, se que no te gusta, pero a mi me encanta que seas bajita para poder llamarte enana. Para poder darte esos abrazos de oso que tanta gracia te hacen, pero que a la vez te llenan de ternura. Cosas como estas a las que tú llamas defectos, en ti se convierten en cosas buenas, y que no hay nada de imperfecto en ti. Tal vez seas pequeña, pero eres inmensamente grande.
Hay una última carta esperándote. Después, darás con migo. Te quiere, Daniel.
Noté como una pequeña lágrima se desplazaba por mi mejilla. Todo lo que Dani había escrito era precioso, me había emocionado realmente. Tenía unas ganas enormes de abrazarlo y besarlo con todas mis fuerzas. Pero la idea de no volverlo a ver en un tiempo me echaba para atrás. Pero, ¿Qué más daba eso? Él me quería, y eso era lo que importaba.
Sin saber donde encontrar la última carta, caminé como una loca por toda la playa, buscando y buscando, pero fue inútil.
Decepcionada, me senté en el suelo. Otra lágrima recorrió mi mejilla. Y en ese momento, me acordé de una parte de la carta. A dani no le gustaba verme triste, él quería que estuviera sonriendo a pesar de todo. Tal vez, no encuentro nada porque estoy triste. Tal vez si sonrío…
Así lo hice. Animada me sequé las lágrimas, miré al cielo y sonreí. Sonreí recordando todos los maravillosos momentos que compartimos. Sonreía, cada vez más y más hasta que finalmente decidí abrir los ojos. Entonces lo vi. Otro farol se había encendido y a su lado se encontraba un gran telescopio bañado por su luz. Sin entender nada me acerqué a el, y allí estaba la ultima carta.
Pensé que nunca la encontrarías. Lo has hecho muy bien. Has sonreído, como ha mí me gusta. Y tengo que decirte que pase lo que pase nunca debes estar triste. Pase lo que pase sonríe, porque sonrisas como la tuya alegran el día a cualquiera. A mí siempre me lo has alegrado.
Supongo que te estarás preguntando que hace aquí un telescopio, bien, yo te lo explico. En cuanto termines de leer esto quiero que mires por el. Cuando lo hagas veras una estrella, pequeñita pero que brilla con gran intensidad. Esa estrella tiene tu nombre, esa eres tú, mi estrella. Te quiere, Daniel.
Hice lo que me pedía, y al mirar por el telescopio pude ver una pequeña estrellita, pero a pesar de su tamaño brillaba con gran intensidad, que se podía apreciar incluso sin utilizar el telescopio.
De pronto, alguien se abrazó a mi cintura y me susurró al oído…
-Te amo, Érica.
-Tonto, ¿Por qué has hecho todo esto?
-Todo esto lo he hecho para demostrarte que te quiero. Te quiero más que a nada y necesitaba que lo supieras.
-No hacia falta, dani, yo se que me quieres. Nunca has parado de demostrármelo.
-Toma, este es el certificado que demuestra que esa estrella tiene tu nombre. Y es que así, valla a donde valla, esté donde esté, tú siempre estarás con migo. No tendré más que mirar al cielo, para poder verte. Cada vez que te eche de menos, cada vez que necesite hablar con tigo, lo haré mirando al cielo y de esa forma será como si tu estuvieras junto a mi.
-Yo… no se ni que decir.
-¿Pero porque lloras tonta?
-Lloro de la emoción. Porque todo esto que has preparado para mi es precioso. Siento que no te merezco, eres tan especial que no se ni que decirte. Y aunque de mi boca no salgan palabras, solo con mirarme a los ojos sabrás lo que mi boca no puede decir. Mis ojos me delatarán. Mis ojos te dirán lo mucho que te amo. Y tal vez ahora te vallas, pero yo se que volverás. Hasta entonces te estaré esperando aquí, siempre. Cada noche le hablaré a esa pequeña estrella a la que tú has bautizado con mi nombre, con la esperanza de que tú estés haciendo lo mismo que yo.
-Volveré, Érica. Te juro que lo haré. Cuando todo esto acabé volveré a por ti para que podamos recuperar todo el tiempo perdido. Hasta entonces no pararé de pensar en ti. En todos esos mágicos momentos que me has hecho vivir. Porque gracias a ti me he convertido en mejor persona, y que me va a costar mucho alejarme de ti.
Todas, todas las noches miraremos la misma estrella, la que más brilla en todo el cielo, esa que lleva tu nombre. De esa forma, será como si nos miráramos mutuamente. Nuestras miradas se unirán a través de la estrella y será como si estuviéramos el uno junto al otro. De esta forma siempre estaremos juntos. Volveré Érica, te juro que volveré. Te quiero, siempre te querré.


#Cierra los ojos, déjate llevar.#
Chloe.

miércoles, 12 de octubre de 2011

Estoy harta. Duke, siempre siempre siempre.

Harta, harta de todo. Porque ésta vida es muy injusta en todos los aspectos. Y es cierto que muchas personas dicen que a base de palos se aprende, pero a mi no me gusta esta forma de aprender, es más, la odio. ¿Por qué no puedo aprender lo que tenga que aprender de una forma más normal? Si, normal. Porque me parece realmente anormal, que lleve toda mi puta vida esperando a un perro para que se me muera. Ya publiqué una entrada sobre Koko, mi primer perro, nuestro primer perro. Pues tras su muerte, obviamente tenia “garantía” y los de la tienda nos dieron otro. Solo faltaba ya que encima que nos lo vendieron con una enfermedad mortal no nos dieran a otro sabes. Bueno, a lo que iba. Mis padres se dejaron la vida y más limpiando la casa con todo tipo de productos desinfectantes para matar al virus, ya que dicen que puede durar vivo hasta seis meses. Incluso fuimos hasta Madrid, que no nos queda cerca, y lo cogimos. Era precioso, ya lo podéis ver en las fotos. 
Un Chihuahua, pero esta vez de pelo largo. La verdad es que queríamos cambiar un poco, para que no nos recordara tanto a nuestro anterior perrito.
Bien, todo marchaba genial. En casa jugaba, corría, saltaba. Nos llenó de cariño y alegría. Era pura energía, y nos sorprendió muchísimo cuando decayó. 
Todo sucedió el sábado por la tarde. Comenzó a vomitar y vomitar sin parar. Ya no tenia ganas de jugar, solo de dormir. Claro, nosotros estábamos preocupadísimos porque uno de los síntomas de ésta enfermedad eran los vómitos, pero como no sangró ni nada, pues quisimos pensar que tal vez podría ser una indigestión. Que equivocados estábamos.
Tras llevarlo mi padre el domingo a la mañana al veterinario, le hicieron la prueba de esta enfermedad llamada parvo virus, y claramente dio positivo. Duke también estaba enfermo.
Aquello nos sentó a todos como una patada en el estomago, o peor.
Sabíamos lo que aquello conllevaba. Iba a morir tarde o temprano. Pocos se salvan de ésta asquerosa enfermedad, generalmente adultos. La probabilidad es muy, muy baja.
Aunque lo cierto era que teníamos esa esperanza, por muy mínima que fuera de que lo hubiésemos cogido a tiempo. No nos podíamos ni siquiera imaginar perderle a él también. Pero informándonos por Internet, nos dimos cuenta de que podía salvarse, pero era muy poco probable.
No nos equivocábamos, tres días después falleció. Puede que ya nos hubiéramos hecho a la idea de ello, entre comillas, pero aún así duele, y mucho. Porque ya es el segundo perro que se nos muere a la semana, y nos toca mucho las narices.
Porque han sido ellos, joder, los de aquella tienda, los culpables de todo. Ellos nos vendieron dos perros enfermos. Y eso debería estar prohibido. Han jugado con nuestros sentimientos. Nos hemos ilusionado, con Koko y con Duke, ¿Para que? ¿Para que tras una semana de tenerlo se nos muera?
Es un puto asco, así. Me da igual la mala forma de hablar, escribir o como lo queráis llamar, pero es que es la pura verdad. Porque tal vez vosotros no lo entendáis, tal vez os parezca exagerado, o no sé, pero os digo enserio, que se sufre y mucho. Es inimaginable el cariño que se le puede coger a un animalito de estos, y más cuando lo llevas esperando toda tu vida. Para que luego se te muera tras una semana de alegrías junto a él.
Y después de ésto, yo me pregunto: ¿Por qué a nosotros? ¿Qué cojones hemos hecho nosotros para que nos caigan desgracias como esta? Porque no es más que eso, una puta desgracia. Porque que se nos muera el primero, bueno, nos dolió muchísimo, pero pudimos superarlo. Pero que encima de que nos arriesgamos, cogemos otro y que también se nos muera, eso ya no es para nada normal.
Encima, lo irónico es que ha fallecido el mismo día que koko, un martes, al igual de que calló enfermo el mismo día, un sábado. ¿Casualidades? Ni idea, solo sé que estoy, estamos, destrozados. Con un dolor y una mala ostia que no podemos con nuestro cuerpo. Dos semanas y dos perros muertos por la misma enfermedad. Des-gra-cia. Eso es. Y nos a tocado a nosotros, no sé porque. Tal vez es una señal de que quien quiera que sea, por alguna razón desconocida no quiere que tengamos un perro. Pero joder, yo, mi hermana mis padres, si queremos uno, y lo vamos a conseguir, ahora, dentro de dos semanas como en un año. Porque a sido algo que siempre hemos deseado, y no va a haber nada que nos haga cambiar de opinión.
En estos momentos estamos todos afectadísimos. Nos habíamos enamorado de él, no literalmente, por lo bonito, bueno que era. Cariñoso cuando tenía que serlo, juguetón la mayoría del tiempo, jamás lo olvidaremos. Porque la imagen que tengo en la cabeza, cuando yo volvía del instituto y lo iba a ver, como se acercaba corriendo a mi encuentro, moviendo la colita sin parar, lleno de alegría, me encanta y jamás la olvidaré. Y espero, quiero pensar que la semana que ha pasado junto a nosotros haya sido inolvidable para él igual que para nosotros. Voy, vamos a pensar que gracias a nosotros a podido vivir una semana llena de cariño junto a personas que de verdad le han querido, ya que de lo contraria hubiese fallecido solo, triste.

Duke, nunca te vamos a olvidar. Enserio.
Puede que llegaras a nosotros tras la muerte de koko, pero a pesar de ello, yo, nosotros te hemos querido de la misma forma. Por todo, porque eras precioso, y alegrabas el día a cualquier persona. Me encantaba jugar contigo, aunque de vez en cuando te pasaras un poquillo y nos mordieras. Pero yo se que lo hacías jugando, además, eras un cachorro, y eso es lo que hacen.
Cada vez que me marchaba al instituto estaba deseando volver a casa para poder estar contigo. Me podría pasar una tarde entera simplemente observándote.
Eras ni mas ni menos, precioso. Y no sabes la impotencia que nos da que te hayas ido. Te teníamos muchísimo cariño, y ahora ya no estás…
Pero a pesar de todo ésto, hay que seguir adelante. Daría lo que fuera por poder recuperarte. A ti y a Koko. Pero lamentablemente, no se puede.
Estés donde estés ahora, se que nos estarás viendo, y ni tú, ni Koko, nunca olvidéis que os hemos querido todo lo que hemos podido y más.
Habéis sido unos perros excepcionales, y a pesar de que hayáis estado poco tiempo junto a nosotros os hemos cogido más cariño que a nada.
Y lo vuelvo a repetir, tal vez no estéis físicamente aquí, junto a nosotros. Pero en mi corazón, en nuestros corazones siempre, repito siempre, vais a estar. 
SIEMPRE. <3
Duke: 1-10-11 / 11-10-11.
Koko: 20-09-11 / 27-09-11.
NUNCA en la vida, os vamos a olvidar. 

jueves, 6 de octubre de 2011

Me gustaría ir a París, mientras me subo a lo alto de la Torre Eiffel y veo toda Francia. ¿Después? A Italia, donde me haré la típica foto donde yo, con toda mi fuerza y valentía, sujetaré la Torre de Pisa para que no se caiga. ¿Luego? A Londres, donde intentaré hacer reír a los guardias de seguridad con mis caras más extrañas y mis chistes malos. ¿Siguiente? A Las Vegas, donde me gastaré la ostia de dinero en el casino para no ganar ni un centimo pero podré decir: ¡Viva a Las Vegas, baby!. ¿Aún más? Pues me iré a Nueva York, sí, y me subiré a la Estatua de la Libertad y veré como todo Manhattan amanece. ¿Y por último? Yo siempre digo que lo mejor, para el final. Por último me iré a Los Ángeles. Arrasaré en todas las tiendas de Beverly Hills, mientras me gasto casi todos los ahorros que me quedan en ropa. Luego, en Hollywood, iré mirando cada una de las estrellas del Paseo de la Fama y me haré una foto con la inmensa mayoría mientras sonrío bebiéndome mi café de Starbucks. También, me haré fotos junto al cartel de Hollywood, señalándolo con una gran sonrisa en mi cara diciendo: Sí, estoy en L.A. Y al final, me subiré a lo alto del mirador y miraré por última vez Los Ángeles. Porque cuando vuelva aquí, a España, me esperará lo mejor,me esperarás tú.




chloe.

miércoles, 5 de octubre de 2011

EB.

-¿Crees que podríamos olvidarnos de todo y bailar esta canción?
-Si.
-Escucha. Alo mejor te parece una locura. Igual ahora no podemos estar juntos pero, pero tienes que confiar en mi. Alo mejor te insulto, o te trato mal o no te miro pero… pero aunque te diga todo eso y tu ahora no entiendas nada, cuanto peor te trate más te estaré queriendo. Te quiero. No lo olvides.

 -------------------------------------------------------------------------------------------------
-¿De que va esto Ainhoa?
-Es que eso es lo que pasa, no te lo puedo decir.
-Ya…
-Por favor Ulises, espera… 
No puedes insultar a la chica que quieres es ser feliz ¿no es eso? … 
Te quiero. ¿Me oyes? Te quiero. Y si quieres puedo subir al palo mayor para… para que todos se enteraran. Y que lo escuchara hasta la última persona del mundo, hasta quedarme sin voz... Pero es que no puedo.
-¡Porque! Que está pasando. ¿Es gamboa?
-No, no…
-¡¿Te está amenazando?!
-No. No Ulises no… Por favor es que esas eran las condiciones, que no me hicieras preguntas y que tuviéramos paciencia y que me dieras tiempo, pero es que… Es que ya han pasado dos días y no hemos podido cumplirlo. Y de verdad te juro, te juro que se que no es fácil. Pero es que es eso lo que te pido. No puedo ofrecerte nada mas… ¡Es que no puedo! No puedo, te lo juro.
-Escúchame. Yo no se ni lo que estamos intentando, pero yo no puedo ni odiarte ni insultarte por las esquinas. Simplemente porque no puedo. Quiero decirte que te quiero todas las mañanas y todos los segundos. Y que no voy a parar hasta conseguirlo. Hasta que me muera de no dormir de no tenerte, de no entenderte. Voy a quererte como tú me pides, sin preguntas.